El coaching nutricional surge a partir del coaching salud o health coaching, siendo esta última una especialización o rama del coaching. El coaching salud nace en 1960, dentro del ámbito hospitalario, aplicándose a la deshabituación del hábito tabáquico y la adherencia al tratamiento de la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
Definición del Coaching Salud según varios autores
“Una herramienta para ayudar a los pacientes a ganar conocimientos, habilidades, herramientas y confianza para volverse participantes activos en su cuidado, a fin de que puedan alcanzar sus metas de salud, identificadas por ellos mismos«, Bennett et al.
”La práctica de educación para la salud y promoción de salud dentro de un contexto de coaching, que refuerza el bienestar de individuos y facilita en las personas el logro de metas relacionadas con la salud», Palmer et al.
Entonces, ¿qué es el coaching salud?
Es un proceso o metodología que ayuda a la persona a tomar conciencia, responsabilidad, compromiso, confianza, habilidades y determinación para volverse participante activo del cuidado de su alimentación, con el fin de lograr un cambio real y permanente en sus hábitos alimentarios.
En resumen, el coaching nutricional es un valiosa herramienta que sirve para que las personas cambien sus hábitos alimentarios y logren resultados extraordinarios en su alimentación y calidad de vida.
Es importante tener claro que el coaching nutricional no es sinónimo de asesoramiento nutricional, tratamiento nutricional o consejo dietético, ya que esto último es competencia directa de los profesionales de la nutrición, como los dietista-nutricionista y dietistas, pero no del coach nutricional.
El coach nutricional ayuda, guía y acompaña a la persona a llevar con eficacia y eficiencia los cambios nutricionales. El coach nutricional no da recomendaciones, ni pautas nutricionales, si no que apoya a la persona a seguirlas, complementando el conocimiento teórico de un experto en nutrición, pero nunca sustituyéndolo.
En definitiva, un coach nutricional impulsa y motiva a las personas a alcanzar sus objetivos nutricionales.
Aplicación del Coaching Nutricional
Para poder dar respuesta a este punto creo conveniente hacer una pregunta: ¿Quién es susceptible de recibir un proceso de coaching nutricional?
Una persona que:
- Quiere mejorar su alimentación, cuenta con los conocimientos teóricos sobre cómo debe ser su alimentación, pero no sabe llevarlo a la practica, o lleva tiempo intentando alcanzarlo, pero tiene interferencias internas y/o externas que le impide avanzar y desarrollar su 100%.
- Tiene un objetivo nutricional claro, pero no se atreve a alcanzarlo. Le da miedo el cambio y/o lo que supondrá tener que ponerse en marcha para alcanzarlo, aunque sabe que este cambio es positivo o así lo cree, ya que sino no tendría sentido realizarlo.
- Está incómodo con sus hábitos alimentarios actuales y quiere cambiar, aunque no sabe a qué, no tiene claro cuál es su objetivo, solo sabe que quiere o necesita realizar un cambio.
En definitiva, el coaching nutricional es una herramienta que puede ser aplicada en todas aquellas personas que quieran realizar cambios en su alimentación con el fin de practicar unos hábitos alimentarios saludables.
